El torno es una de las máquinas herramientas más utilizadas en la industria de la metalmecánica. Gracias a su versatilidad, el torno se ha convertido en pieza clave para el mecanizado de distintos materiales, pero también se utiliza para roscar, hacer cortes, agujerear, desbastar, cilindrar y hacer ranuras a piezas de distintos materiales. Pero, ¿sabes para qué sirve el torno en la industria del mecanizado?
¿Qué es el torno y cómo funciona?
Históricamente, se cree que el torno (manual) se inventó en el año 850 a.C. en Egipto, pero su uso se volvió muy popular durante la Revolución Industrial. Fue durante este período de tiempo cuando el torno comenzó a utilizarse para la mecanización rudimentaria de metales; es decir, durante la Revolución Industrial el torno se perfeccionó para poder dar forma a piezas de metal, algo que a día de hoy conocemos como mecanizado.
El torno funciona haciendo girar, mediante revoluciones, la pieza que se va a mecanizar y que permanece sujeta a un cabezal. Mientras la pieza gira, entra en contacto con una o múltiples herramientas de corte que se empujan directamente hacia la superficie de la pieza y avanzan sobre ella. El mecanizado por torneado tiene como resultado el arranque de virutas, pequeñas láminas metálicas.
Pero, ¿para qué sirve el torno en la industria del mecanizado? Sus aplicaciones son múltiples, pues el mecanizado no solo lo realiza a través del torneado, sino que es capaz de dar forma a las piezas a través de distintos procesos (existen once, aproximadamente). Aquí encontramos, por ejemplo, el cilindrado, taladrado, ranurado, tronzado, moleteado, refrentado, roscado interior, roscado exterior, mandrinado, chaflanado y cónico. Cada una de estas técnicas de mecanizado tiene sus propias características y, para ejecutarlas con precisión, se requiere a un tornero o un torno por control numérico CNC, que también requerirá a un operario que programe la máquina.
Beneficios del mecanizado de piezas con torno
El mecanizado de piezas utilizando un torno como máquina herramienta supone grandes beneficios para la industria metalmecánica. La principal ventaja es que el torno admite el trabajo de piezas de distintos materiales. En esta máquina se puede trabajar, por ejemplo, acero al carbono, acero inoxidable, aluminio, cobre, zinc, magnesio, titanio, etcétera.
El torno también tiene la ventaja de que en él se pueden mecanizar piezas de distintos tamaños y a las que puede dárseles distintas formas. Además, cuando se utilizan tornos por control numérico CNC, los resultados son más precisos y con acabados de gran calidad.
Proceso de mecanizado en torno
El mecanizado de piezas por torneado tiene, además, la ventaja de ser un proceso muy sencillo y que no supone un gran esfuerzo por parte de los operarios, especialmente si la máquina herramienta funciona por CNC. Las fases del proceso son:
- Fase de aplicación, donde se carga y se fija la pieza en el torno. También se realiza la elección y colocación de la herramienta que se va a utilizar para el mecanizado y que depende de la forma que se le quiere dar a la pieza. El tiempo de la fase de aplicación varía en función del tamaño de la pieza a trabajar.
- En la segunda etapa del proceso o de corte es donde se realizan los correspondientes cortes de la pieza con la herramienta que se ha elegido. Durante esta fase, la pieza gira sobre su propio eje.
- Fase de traslación o de movimiento, que es cuando la herramienta entra en contacto con la pieza que está girando sobre su propio eje. Esta fase puede ocurrir a la inversa, cuando el proceso concluye o cuando es necesario sustituir la herramienta por el deterioro de la misma.
Tipos de tornos más utilizados para el mecanizado
En la industria de la metalmecánica existen distintos tipos de torno aptos para el mecanizado de piezas. Cada uno tiene sus características particulares y deben de estudiarse antes de decantarse por uno de ellos para incluirlo en un taller de mecanizado.
Torno CNC o por control numérico
Este tipo de torno funciona mediante programación por ordenador. Primero se crea un diseño por ordenador a través del programa CAD que después se traduce a través del software CAM y que es el encargado de ordenar al torno (vía control numérico) las indicaciones para dar forma a la pieza. Se trata de uno de los tipos de torno más perfectos para el mecanizado de piezas.
Torno paralelo
El torno paralelo se caracteriza por un arranque de viruta a través de movimientos en los que la herramienta de corte se ajusta directamente sobre la pieza que gira sobre su propio eje. Este torno permite el cilindrado, taladrado, roscado, etcétera. Pero, para su utilización, se requiere de un tornero cualificado.
Torno vertical
El torno vertical es el más recomendado para el mecanizado de piezas de gran tamaño y se caracteriza porque incluye, la mayoría de las veces, la tecnología CNC.
Comentarios recientes