La fresadora es una máquina herramienta que, desde su aparición, ha evolucionado y se ha adaptado a las necesidades de la industria metalmecánica. Las fresadoras son ideales no solo para la industria de los metales, sino también para las labores de carpintería, ebanistería y para los aficionados al bricolaje. Dentro de los distintos tipos de fresadoras que existen hoy en día, la mejor alternativa para los pequeños talleres y particulares es la fresadora electrónica.
¿Qué es la fresadora electrónica?
La fresadora electrónica es una herramienta de pequeñas dimensiones recomendada para las personas que deseen iniciarse en las labores de carpintería, ebanistería y otras tareas de bricolaje. Esta máquina permite el mecanizado de piezas de madera, metal, plástico o aluminio, lo que la convierte en un accesorio versátil. La fresadora electrónica es muy fácil de usar y permite realizar múltiples tareas como ranurado, pulido, perfilado, erosionado, desbastado, biselado, corte, etcétera.
A la fresadora electrónica también se la conoce como fresadora de superficie. Se trata de una mejora de las fresadoras convencionales pues es eléctrica y portátil. No solo es una gran apuesta para las personas que tienen pequeños talleres o son aficionados del bricolaje, sino para los grandes talleres de mecanizados y fábricas. La portabilidad de esta máquina aporta comodidad a los operarios.
Esta máquina también está recomendada para los trabajos artísticos, pues permite alisar, perforar, labrar y dar forma a distintas figuras. Los resultados con esta herramienta son de calidad y muy estéticos.
Características de la fresadora electrónica
La fresadora electrónica se caracteriza por poder realizar cortes rotativos a gran velocidad y hacer el mecanizado de piezas por arranque de viruta de madera, metales delgados y otros materiales como el plástico. Aquí es posible fabricar ranuras, molduras, encajes para bisagra y otras operaciones decorativas; es decir, esta máquina permite no solo el fresado tradicional, sino otro tipo de trabajos estéticos.
En la fresadora de superficie, el husillo de trabajo sostiene a la fresa por el vástago. Al igual que las fresadoras de gran tamaño, la herramienta de corte de esta herramienta electrónica es la fresa. La fresa es una herramienta provista de filos o labios que giran hasta aproximarse a la superficie de las piezas para producir el arranque de viruta. En estas máquinas, la fresa suele colocarse de manera perpendicular a la superficie de desplazamiento.
Este tipo de fresadora, además, pertenece a las llamadas máquinas de accionamiento directo. Esto quiere decir que la fresadora no requiere de utilizar una reductora, que es la que utiliza las revoluciones del motor para el accionamiento de la herramienta de corte.
Trabajos específicos
Ya hemos adelantado algunos de los trabajos que la fresadora electrónica o de superficie puede hacer y, aunque parece que es una máquina solo de carpintería, existen distintas piezas de metalmecánica que las fresadoras electrónicas son capaces de realizar. Aquí encontramos, por ejemplo:
- Perfil cola de milano o de pato
- Taladrado o perforado
- Creación de bordes redondos
- Fresado de media caña
- Fresado para enrasar
- Mecanizado de marcos
- Fresado de encajes
- Creación de agujeros rasgados
- Biseles
- Rótulos
- Cantos
- Perfiles
- Copiado
Composición
La fresadora electrónica está compuesta por una bandeja base que se guía por dos columnas; estas tienen una carrera que oscila entre los 35 y 80 milímetros. Las columnas están fijadas a una placa base de aluminio y con material sintético antideslizante.
El ajuste en estas fresadoras es rápido, ya que cuentan con un bloqueador de husillo que permite el cambio rápido entre fresas. La empuñadura presenta un diseño ergonómico que aporta comodidad en el fresado. Además, las fresadoras de superficie están provistas con pinzas de fijación adaptables. Dependiendo del modelo, estas pinzas pueden medir 6, 8, 10 y 12 milímetros o 1/4, 1/2 o 3/8 de pulgada.
Ventajas de la fresadora electrónica
Aunque sea una máquina herramienta de tamaño pequeño, las fresadoras electrónicas aportan una serie de beneficios para los distintos talleres e industrias. Además de su tamaño compacto y portabilidad, estas herramientas son muy versátiles y útiles para realizar múltiples tareas no solo de mecanizado y forma, sino también de acabado.
Por otra parte, las fresadoras de este tipo pueden trabajar sobre distintos materiales que incluyen metales (de preferencia blandos), aluminio, plásticos y maderas. En cuanto a la potencia y precisión, está comprobado que estas máquinas son una gran alternativa.
¿Cómo escoger la mejor fresadora de superficie?
Si estás considerando adquirir una fresadora electrónica para el taller o para el hogar, debes saber que existen diferentes tipos en el mercado. La elección de la fresadora deberá hacerse de acuerdo a los usos que se le dará a la máquina y los materiales que se van a trabajar en ella. Ten en cuenta la potencia, pues esta es la que determina la capacidad de trabajo de la herramienta.
Por ejemplo, para trabajar maderas blandas será suficiente con escoger una fresadora con potencia de cerca de 1200 W. Cuando se trabajan materiales más duros como el metal o el plástico, las potencias de 1600W o superiores son las más recomendadas. La potencia de la máquina no solo determina su capacidad de actuación, sino también el tamaño de la fresa. Cuanta más potencia tenga la herramienta, será posible adquirir una fresa de diámetro mayor.
Por último, y dependiendo del fabricante, las fresadoras electrónicas pueden incluir accesorios como el aspirador de polvo, la mesa de trabajo y las guías.
Comentarios recientes